El seleccionador brasileño Tite admitió, en declaraciones que publica la revista alemana "Kicker", que e l 1-7 que encajó Brasil ante Alemania en la semifinal del pasado Mundial sigue siendo "un fantasma".
El fútbol brasileño aún sufre el 7-1 que le propinó Alemania en el Mundial
Tite, técnico de la canarinha, habló de las repercusiones de la memorable goleada que mantiene abierta la herida.
"El 1-7 es del Mundial es un fantasma. Ocurrió, sigue estando presente. La gente habla suficiente de ello y cuanto más se habla menos desaparece el fantasma", dijo Tite en una entrevista concedida con motivo del amistoso del martes en Berlín ante Alemania.
Por ello, Tite admite que el partido amistoso tiene una gran significación psicológica.
"Los chistes sobre el tema no son malignos. Pero la herida sigue abierta. El partido de Berlín es parte del proceso de cicatrización", dijo.
Con ello, el enfrentamiento es "un gran reto no sólo en lo deportivo sino también en lo emocional".
"Por ello nos preparamos para poder dar un gran rendimiento y para el Mundial este partido nos ayudará", dijo.
Tite considera que su rival del martes está entre los favoritos para ganar el Mundial "no sólo por el fútbol que juega sino también por la continuidad que tiene a alto nivel lo que es muy difícil de lograr".
Tite destacó que su homólogo alemán, Joachim Löw, ha logrado integrar jugadores jóvenes en el equipo que llegaron a la final de los Juegos Olímpicos y que "jugaron la Copa Confederaciones con una naturalidad como si llevaran mucho tiempo" en la selección.