El motivo que impide que Michael Jordan sea entrenador

Michael Jordan, aún tras más de 15 años después su retiro, como uno de los deportistas más grandes e influyentes del mundo y cada vez que se habla del mejor jugador de baloncesto de la historia su nombre sale a relucir, pero el legendario número ‘23’ de los Chicago Bulls contó porque nunca ha sido entrenador en la NBA.

Jordan contó en una entrevista realizada para la revista 'Cigar aficionado' en 2017 y de la que ahora se ha publicado la versión extendida, el motivo que le ha impedido sentarse en el banquillo.

"No tengo paciencia para entrenar. Mi mayor problema, desde un punto de vista competitivo, es el punto de vista del jugado y el punto de vista desde el que yo vi el juego. Cambia totalmente. Para mi, pedir a un jugador que se centre en el juego de la forma que yo jugaba no sería justo ya que si no la hiciera no hay sitio donde pudiera esconder mis emociones. No tendría paciencia. Nunca he sentido que pudiera hacerlo desde un punto de vista emocional porque soy muy diferente y tengo una percepción distinta a la de los jóvenes de hoy en día".

El hoy propietario de los Charlotte Hornets también reveló un vicio que ha tenido desde su época como jugador.

Entre los cortes no vistos con anterioridad de dicha entrevista está en el que confiesa su ritual antes de cada partido que su equipo jugaba como local, que pasaba por fumarse un puro antes de entrar al pabellón.

"Teníamos que estar en el estadio sobre las seis para los partidos de casa y el tráfico en Chicago era tan malo que tardábamos una hora y cuarto o incluso hora y media. Ahí estaba yo, sentado en el coche, preocupado por el tráfico. Estaba muy tenso. Así que empecé a fumar. Se convirtió en un ritual en los partidos de casa", confesó Jordan.