Tres títulos en cuatro años han bastado para colocar a Golden State como el equipo a vencer en la NBA. Solo los Cleveland Cavaliers, comandados por LeBron James, han logrado dejar su marca en la historia de un equipo que reúne todos los requisitos para ya ser considerado una nueva dinastía en el liga de basquetbol más prestigiosa del mundo.
Golden State Warriors, la nueva dinastía a vencer en la NBA
Tres campeonatos de la mejor liga de basquetbol del mundo debería ser un argumento suficiente para rendirse ante el conjunto de la Bahía.
Como toda dinastía, los Warriors han logrado "convertir" a fanáticos y llamar la atención de otros proclamados neutrales a base de campeonatos y un estilo de juego demoledor, electrizante y entretenido que parece siempre encontrar las respuestas en la duela.
Cuando Golden State parecía estar contra la pared en el Juego 4 de las Finales de 2018, Draymond Green, Kevin Durant y Steph Curry se acordaron de su papel de favoritos y pasaron por encima de unos Cavs limitados y esperanzados en el juego de LeBron.
El peso y calidad de los jugadores es otro factor que convierte a un equipo en una dinastía. Todo conjunto histórico posee una alineación de ensueño.
Contar con el talento del mejor lanzador de todos los tiempos en Steph Curry es ya un motivo para pavonearse. Pero también aparecen nombres como el de Kevin Durant, Draymond Green, Klay Thompson, y Andre Iguodala que han dado identidad a un equipo que había vivido casi en el olvido.
El deporte es de momentos y los ejemplos sobran: los New England Patriots comandados por Brady y Belichick; el Real Madrid de CR7 y sus cuatro Champions en cinco años; Serena Williams como la reina del deporte blanco; Golden State y su alineación de lujo.
¿Le alcanzará a LeBron James y Los Lakers para detener el paso devastador de un conjunto bien organizado y motivado para repetir como campeón una vez más? La respuesta la tendremos en poco tiempo.