Capítulo 3: Myles Garrett, ¿el nuevo fiasco o la resurrección de los Browns?
El pronóstico se cumplió y el prospecto de los Texas A&M Aggies fue elegido por Cleveland
Tiene la velocidad de un linebacker, un físico pocas veces visto en un ala defensiva colegial, proviene de una universidad donde el deporte se vive como una religión y de una familia de deportistas de alto rendimiento.
Parece una apuesta segura. Myles Garrett, la selección global número uno del Draft 2017 fue una de las más previstas y anunciadas que se hayan visto. Los Cleveland Browns buscarán, por fin, lograr una reestructuración sólida iniciando desde su defensa.
El liniero de Texas A&M sabe perfectamente qué significa jugar con un estadio lleno. El Kyle Field es uno de los graderíos más imponentes de la NCAA, con capacidad para 102 mil 733 aficionados, el quinto más grande del mundo y cuarto del fútbol americano colegial de Estados Unidos.
El hermanastro de Garrett, Sean Williams, jugó cuatro temporadas en la NBA y fue seleccionado en el lugar 17 de la primera ronda en el Draft de 2007. Su hermana Brea está en el último año en el equipo de atletismo de Texas A&M y es la campeona reinante de la NCAA en lanzamiento de bala. Su madre. Audrey, también fue atleta. Está en sus genes.
La única duda, aunque justificada, fueron sus números de la última temporada. Fue limitado por un esguince de tobillo en la pierna izquierda que le hizo perderse dos partidos, sin embargo, ni siquiera eso lo detuvo para estar en el equipo All-American de 2016.
Garrett aún tenía un año más de elegibilidad, pero el 31 de diciembre pasado anunció su intención de entrar al Draft de 2017.
En el baloncesto cada vez es más común que deportistas se salten la etapa universitaria y vayan directo de la preparatoria al profesionalismo. Casos así, muchos otros, son los de Kobe Bryant y LeBron James. Pero en el fútbol americano el asunto es más delicado, ya que el desarrollo físico es más importante y los años del "college" son decisivos.
Sin embargo, desde hace algunos años ya hay casos sonados de jugadores que se "saltan" el último año de la universidad para ir a la NFL. Uno de ellos fue otro prospecto de los Aggies, Johnny Manziel, un quarterback al que en su momento se le comparó por sus habilidades para correr el balón con Michael Vick. Fue precisamente seleccionado por los Browns en 2014, sin embargo, jamás dio el ancho y hoy es un agente libre que ningún equipo quiere tomar.
En su momento, muchos expertos aseguraron que Manziel se apresuró demasiado al saltarse su último año como universitario. En su posición, la madurez, las habilidades de liderazgo, la lectura del juego y muchos otros factores son fundamentales. Un quarterback lleva un proceso minucioso y la apuesta le salió mal a "Johnny Football".
En el caso de Garrett, las preocupaciones van por el lado físico, esperar que no tenga lesiones que reduzcan su rendimiento. Su lucimiento individual dependerá más de sus propias aptitudes que del trabajo en equipo que, hay que decirlo, será deficiente todavía. Los Browns tienen huecos por llenar en todas sus líneas, su marca de 1-15 de la temporada pasada no fue casualidad.
¿Por qué tomar a un ala defensiva y no a alguien en una posición más "importante" o mediática? Porque cuando te falta gente en todas, toma al mejor talento disponible. Regla básica del Draft. Cleveland jugó seguro, pero sólo el tiempo podrá decir, como con todos los 'picks', si fue exitoso.
Garrett por si solo no le dará su primer Super Bowl a los Browns, pero por algo se empieza.