Zack Sánchez, esquinero de la Universidad de Oklahoma, es uno de los prospectos de ascendencia hispana en el próximo Draft 2016 de la NFL.
Zack Sánchez, un fanático de la comida mexicana cuya familia le enseñó a amar sus raíces
El CB de la Universidad de Oklahoma y su orgulloso camino hacia el Draft de la NFL.
En entrevista exclusiva con NFL.com/Español, Sánchez nos cuenta de dónde sacó el carácter que lo ha puesto a un paso de llegar a la NFL.
“Tanto mi padre como mi madre son trabajadores incansables y eso me lo enseñaron a mí, por lo que yo soy quien soy por mi familia”.
“Ellos hicieron un gran trabajo de enseñarme eso cuando era un niño, mi mamá siempre me obligaba a limpiar la casa, tenía que lavar mi ropa, tenía que hacer mis cosas, me hicieron responsable desde los 7 años de edad y es la razón por la que soy el hombre que soy ahora y estoy agradecido por eso”.
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Como su apellido lo delata, Zack Sánchez tiene sangre latina, cosa que el jugador de apenas 21 años de edad presume y no oculta.
“También estoy agradecido por mi herencia hispana, me encanta y la porto con mucho orgullo”.
“La familia de mi papá es originaria México, de Chihuahua, y tanto mi padre como mi madre son de pequeños pueblos en Texas, yo nací en West Texas, en Abilene y me mude a Forth Worth a los 4 ó 5 años de edad”.
“En Forth Worth la cultura latina es grandiosa y a mí siempre me encantó la comida mexicana, no es algo nuevo para mí y amo esa comida, ojalá que el equipo que me reclute sea de una ciudad de mucha población latina”.
Una forma de demostrar esa identidad es a través de la comida y Sánchez tiene gustos muy detallados en ese aspecto.
“Me encantan las tortillas y los frijoles y podría comer eso por el resto de mi vida, también me encanta la carne asada y la barbacoa, los tacos en la calle, mi tía también me hacía enchiladas”.
Para el orgulloso jugador procedente de la Universidad de Oklahoma, su labor en Norman no se limitó a su actividad en el campo de juego.
“Cuando llegué a Oklahoma yo no sabía que (el basquetbolista) Eduardo Nájera había estudiado aquí, me enteré y él también jugó con los Dallas Mavericks, él junto con otros grandes atletas hispanos como Tony Casillas con los Sooners me inspiraron a ser un gran modelo para esta comunidad, y con mi herencia hispana quería también dejar mi marca aquí y mantener la tradición de grandes atletas hispanos y dejar un impacto en la Universidad”.
“Claramente tengo mucho que hacer para alcanzarlos a ellos, pero tuve una gran carrera colegial y pude dejar mi legado aquí como ellos lo hicieron antes de mi”.
Todo parece indicar que el nombre de Zack Sánchez será pronunciado en uno de los tres días del próximo reclutamiento colegial en Chicago, Illinois, antes de que eso ocurra, el esquinero quiere agradecer a los responsables de que pudiera estar en ese momento.
“Quiero hablar sobre las personas que marcaron mi vida para poder llegar a estar en la antesala de escuchar mi nombre en el Draft, en primer lugar están mi padre y mi madre, también está mi hermana, mi tía, mi primo y mi abuelo con el que hablo dos o tres veces por semana, el sigue viviendo en West Texas y ha superado muchos problemas, el poder ayudarlo me motiva mucho”.
Zack sabe de los planes internacionales de la NFL y para él, esta es otra motivación para jugar en el mejor nivel del fútbol americano profesional.
“Aún no se en que equipo jugaré en la NFL pero sé que los Houston Texans y los Oakland Raiders jugarán un partido de temporada regular en la Ciudad de México, me emocionaría jugar ahí, mi familia se emocionaría mucho, mi mamá y mi papá. Podría regresar para enseñarle a mis compañeros de equipo,a todos los que estén conmigo mi comida, mi herencia, la manera que somos como personas, que los hispanos somos trabajadores incansables”.
“Creo que la gente sabe eso de nosotros pero el hecho de que puedan conocerlos un poco mejor y la comida que comemos y nuestra herencia cultural y como interactuamos entre nosotros y las grandes personas que somos es algo que me emociona y salir con el apellido Sánchez en mi espalda, ojalá muchos aficionados tengan mi jersey con el apellido Sánchez en la espalda y que la Ciudad de México me ame, eso sería grandioso también”.
“Nunca se sabe, podría elegirme uno de esos dos equipos o quizás otro e ir a jugar después, pero lo que es un hecho es que sería una maravillosa experiencia”.
Una oportunidad de oro para que Zach Sánchez crezca no solo como deportista, sino también como ser humano.
“Esa sería mi primera vez en México, pero he hablado con mi mamá y mi papá que cuando ahorre un poco de dinero definitivamente es un viaje que vamos a hacer y no solo a un gran hotel a algo así, quiero vivir nuestra cultura, mi papá ha estado ahí y mi mamá también, pero yo quiero conocer personalmente de donde viene mi familia y ese herencia de primera mano”.
“Entiendo muy bien el español, pero no lo hablo muy bien, mis padres me hablan en ese idioma y yo les respondo en inglés, inclusive mi tía lo habla muy bien, una de mis metas es hablar fluidamente el español para poder dar entrevistas y es algo en lo que tengo que trabajar para que cuando pueda volver a mi país pueda interactuar con mi gente y tener conversaciones completas”.
Es así como Zach Sánchez vive los días previos al Draft 2016 de la NFL y su historia aún está por contarse, NFL.com/Español estará pendiente de ella.