Tras confirmarse que el exjugador padecía de CTE (Encefalopatía Traumática Crónica), se presume que el equipo conocía que el deportista padecía una lesión cerebral común en los jugadores de fútbol americano.
El 'tight end', que jugó en la NFL para los New England Patriots, se vio envuelto en varios casos de asesinato que lo llevaron hasta el suicidio, este 19 de abril de 2017 en su celda.