Mientras echaba un vistazo por el Salón de la Fama del Tenis Internacional, Andy Roddick pensó sobre todas las cosas que no es.No tan bueno como los mejores de todos los tiempos, especialmente estadounidenses que le precedieron en el recinto de Newport como John McEnroe, Pete Sampras y Andre Agassi. No tan bueno como los Cuatro Grandes del presente -- Roger Federer, Rafael Nadal, Novak Djokovic y Andy Murray-- que le impidieron ganar más de un Grand Slam."No soy el mejor de todos los tiempos. No ganaré Wimbledon. No soy el mejor de mi generación. No soy el que mejor se comporta. No soy el más refinado", declaró Roddick durante un discurso el sábado que en ocasiones fue divertido y en otras conmovedor."Y nunca voy a subestimar este honor", agregó. "Quizá no sea muchas cosas, pero a partir de este día, nunca voy a ser algo menos que un miembro del Salón de la Fama".Conocido por su potente servicio y su frecuente humor mordaz, Roddick ingresó al Salón de la Fama junto con la belga Kim Clijsters, la seis veces medallista paralímpica Monique Kalkman-van den Bosch y el periodista e historiador deportivo Steve Flink. El instructor de tenis e innovador Vic Braden, que murió en 2014, fue exaltado póstumamente.Clijsters ganó cuatro títulos en sencillos de Grand Slam y 31 en total, entre ellos el Abierto de Estados Unidos de 2009 estando fuera del ranking y al recibir una invitación de wild-card tras volver de su retiro por el nacimiento de su hija. Chris Evert, a su vez integrante del Salón de la Fama, presentó a Flink en su inducción. La ex tenista dijo haber desarrollado una amistad con el periodista a lo largo de su carrera, que inició cuando él era investigador para el escritor de tenis Bud Collins, también miembro del Salón de la Fama. Flink posteriormente escribió libros y artículos de revista y ofrecía comentarios sobre el tenis en radio y televisión.La holandesa Kalkman-van den Bosch recordó ´su lucha contra el cáncer a los 14 años y su temor de no volver a jugar tenis. Sus amigos empujaban su silla de ruedas por toda la cancha para que ella pudiera sentir que seguía ligada con el deporte."Soy muy afortunada de tener el tenis en mi vida", indicó. "Ha sido mágico para mí".Roddick mencionó que no se pone a pensar cómo hubiera sido su carrera de no haberse topado con Federer, Nadal, Djokovic y Murray."Sigo considerando que soy un afortunado", dijo Roddick, quien perdió ante Federer en finales de Grand Slam. "Fue como defender ante (Michael) Jordan. Pelear la distancia con (Muhamad) Alí. Lanzarle a Babe Ruth. Puede decirse que sé cómo era verlo a (Pablo) Picasso. Ví de todo"."Gané unas cuantas veces, no muchas, pero unas cuantas", señaló. "Los cuatro grandes realmente (me sacaban de quicio) la mayoría de las veces que les enfrenté. Pero me siento totalmente orgulloso de mi vida y una carrera asociada con semejantes individuos".En la rueda de prensa previa, Roddick reveló que al despertar en la mañana lo primero que vio fue un mensaje de texto de Federer. "Es casi imposible que no te caiga bien como persona".