Serna Williams, tenista número uno del mundo, no ha pasado por alto la brutalidad policial contra la raza negra y publicó en su cuenta de Facebook un mensaje en el que comparte una situación que vivió junto a un sobrino de 18 años y el temor que le produjo ver a un policía.
Serena Williams levanta la voz contra la brutalidad policial y el racismo
La tenista número uno del mundo compartió en Facebook una publicación en la que firmemente señala: "No permaneceré callada"
Desde el pasado mes de agosto Colin Kaepernick, quarterback de los San Francisco 49ers, encabeza una serie de protestas de deportistas en contra del recismo y la brutalidad policial. La futbolista Megan Rapinoe se arrodilló durante el himno nacional en un amistoso ante Estados Unidos contra Tailandia y otros deportistas se han ido sumando al movimiento. Hasta el momento Serena Wiliams se había mantenido al margen y habrá que esperar si al igual que otros atletas colocará una de sus rodillas al suelo mientras retumba el himno de los Estados Unidos de Norteamérica.
La publicación de Williams en Facebook es la siguiente:
Hoy, le pedí a mis sobrino de 18 años (es de raza negra) que me llevara en auto a mis reuniones y así yo podría concentrarme en trabajar en mi teléfono. A la distancia vi a un policía al lado del camino.
Rápidamente verifiqué la velocidad a la que conducía mi sobrino y recordé el horrible video de la mujer en el carro, cuando un policía le disparó a su novio. Todo esto me vino a la mente en cuestión de segundos, incluso lamenté no estar conduciendo. Nunca me perdonaría si algo le pasara a mi sobrino, él es inocente, como lo eran los otros.
Soy una total creyente de que no todos son malos, solo algunos son ignorantes, temerosos, sin educación e insensibles a lo que le pasa a las millones y millones de vidas. ¿Acaso no hemos pasado por suficientes cosas, no hemos abierto tantas puertas, no hemos impactado millones de vidas? Entonces me di cuenta de que debemos seguir, porque no se trata de qué tan lejos hemos llegado sino de qué tanto tenemos que recorrer todavía
¿He alzado mi voz? Tengo que mirarme a mí misma. ¿Qué hay de mis sobrinos? ¿Qué pasa sin tengo un hijo y qué pasa con mis hijas? Como dijo el doctor Martin Luther King: 'Hay un momento en el que el silencio se convierte en traición'. Yo no permaneceré en silencio.