CONMEBOL

    Quintero se transfiguró en Zidane: ¡River Plate alza la Libertadores en el Bernabéu!

    Marcelo Gallardo tuvo razón y su escuadra sacó fuerza de la flaqueza lejos de su estadio Monumental en una final inolvidable.


    Por:
    TUDN


    Video En una dramática final, River Plate se coronó campeón de la Copa Libertadores 2018
    Tras el empate a un gol en los 90 minutos, el colombiano Juan Fernando Quintero y el argentino Gonzalo Martínez le dieron la victoria al equipo Millonario.
    1:19 mins

    Si en la ida en La Bombonera fue Boca Juniors quien lució mejor imitando las estrategias de River Plate, en la vuelta en el Bernabéu fue River quien mejoró imitando las de Boca.

    Aunque el inicio del partido fue de cautela y nerviosismo, a ojos de Marcelo Gallardo, viéndolo todo en la penumbra de algún palco, el plan de neutralizar a Darío Benedetto funcionaba relativamente bien.

    Publicidad

    Tanto así que el primer remate del "Pipa" a la meta de Franco Armani no llegó sino hasta pasada media hora vía un tiro libre directo. Hablando boxísticamente, River y Boca se enfrentaban con las guardias altas.

    Sin embargo, al minuto 39 el primer intercambio de puños evidenció la vulnerabilidad de ambos contrincantes. Un recorte del extremo xeneize Sebastián Villa buscando la frente de Benedetto acabó instantes después en un remate del extremo millonario Gonzalo Martínez, del otro lado del campo.

    El segundo intercambio fue el 1-0 de Boca. Los dirigidos por Gallardo se volcaron al frente tras un fallo en la salida del portero Esteban Andrada cuando el charrúa Nahitan Nández se transformó en Luka Modric, inventándose un pase magistral que dejó a la defensa a merced de Benedetto.

    Gallardo seguramente tragó saliva.

    Como también tragaron saliva los miembros de la sala de videoarbitraje al dictaminar como falta en ataque una jugada donde Andrada derribó al delantero Lucas Pratto en área de Boca y que pudo haber sido penal. En la confusión, Gallardo sacó el as bajo la manga: el colombiano Fernando Quintero.

    El colombiano Juan Fernando Quintero (izquierda) anotó el gol del desequilibrio a favor de River Plate en la conquista de su cuarta Copa Libertadores en la historia.
    Dos técnicos ganadores con River y Boca, Ramón Díaz (izquierda) y Miguel Ángel Russo (derecha), respectivamente, llevaron a la cancha del Estadio Santiago Bernabéu el trofeo de la Copa Libertadores.
    Más de 63 mil espectadores colmaron la casa del Real Madrid en la inédita final de Copa Libertadores fuera de territorio americano.
    Los dos equipos posaron juntos en mensaje de rechazo a la violencia que empañó el normal desarrollo de la Final hace 15 días en Buenos Aires.
    Durante el primer tiempo, River Plate lución sin claridad con la pelota, Boca tuvo la iniciativa y buscó anotar primero.
    En el minuto 30 un tiro libre de Darío Benedetto para Boca chocó contra la barrera, del rebote llegó la primera opción de gol del partido.
    El remate de Pablo Pérez lo desvió un defensa y aunque era inalcanzable para el arquero de River Plate, Franco Armani, el balón se fue desviado.
    Al minuto 43, Darío Benedetto definió en mano a mano ante Franco Armani para poner en ventaja a Boca Juniors por 1-0.
    Darío Benedetto con este particular gesto a Gonzalo Montiel durante la celebración del gol.
    En el minuto 55 este choque del arquero de Boca Agustín Rossi (izquierda) con Lucas Pratto de River Plate (derecha) no fue sancionado como penal.
    River Plate mejoró en el segundo tiempo y poco a poco llevó a Boca donde quería, al punto de desconcentrarse y perder el control del partido.
    En el minuto 67 Exequiel Palacios encontró el empate para River después de una buena triangulación dentro del área rival.
    Boca Juniors no volvió a tener el mismo impacto del primer tiempo y le costó generar ocasiones para anotar otro gol.
    Fruto del desgaste, jugadores como Nahitan Nández sufrieron lesiones musculares, justo antes de entrar a la prórroga.
    La peor noticia para los Xeneizes fue perder por expulsión al colombiano Wilmar Barrios (centro) apenas en el segundo minuto del alargue.
    Al minuto 109 con un golazo de media distancia, el colombiano Juan Fernando Quintero (izquierda) marcó el 2-1 para River Plate.
    Quintero hizo el gol del desequilibrio, del que Boca Juniors no pudo levantarse a pesar de su esfuerzo y ganas por lograr de nuevo la igualdad.
    El técnico Guillermo Barros Schelotto lamentó la salida por lesión de Fernando Gago, que a dos minutos del final de la prórroga dejó a Boca con nueve hombres.
    Ya en el minuto 120 Gonzalo Martínez definió con el arco a merced y la defensa de Boca Jugada al ataque para sellar el 3-1 a favor de River Plate conquistando la soñada Copa Libertadores.
    En su historia, River Plate ha ganado cuatro veces la Copa Libertadores: 1986, 1996, 2015 y 2018.
    Boca Juniors ha ganado la Copa Libertadores en seis ocasiones: 1977, 1978, 2000, 2001, 2003 y 2007.

    1 / 21
    Imagen Reuters.
    El colombiano Juan Fernando Quintero (izquierda) anotó el gol del desequilibrio a favor de River Plate en la conquista de su cuarta Copa Libertadores en la historia.


    Así, River recurrió al buen toque que le caracteriza históricamente. Quintero se entendió de inmediato con Ignacio Fernández para causar el muy merecido gol igualador a tres en el marcador global anotado por el 'Oso' Pratto.

    Entonces, el combate se volvió combate sudamericano de verdad. Hachazos, empujones, gritos desesperados y miradas de furia entre los 22 sobre el césped. Benedetto ya había abandonado el campo y su reemplazante Ramón Ábila entró a darse piñas con los zagueros de River.

    Publicidad

    Entre entumecimientos y calambres , se jugaron los tiempos extras de una final interminable. La cereza en el pastel del dramatismo fue puesta por el árbitro uruguayo Eduardo Cunha al expulsar por doble amarilla a Wilmar Barrios de Boca.

    Cuando los penales parecían inminentes, Quintero se transfiguró en Zinedine Zidane. Su remate dio en el larguero y entró en la meta con toda la fuerza de la historia para ahuyentar por siempre al fantasma de la 'B.'

    Completamente jugado, Boca concedió el 3-1 en contra que hizo a la mitad del Bernabéu estallar en éxtasis luego del silbatazo final. Solamente en ese momento, Marcelo Gallardo se levantó de su asiento, salió de la penumbra, y entró al túnel del tiempo donde viven eternamente las leyendas del fútbol.

    Relacionados:
    En alianza con
    civicScienceLogo