Disputa con Edinson Cavani el Botín de Oro en Europa: mientras el uruguayo lleva 17 goles en 16 partidos de liga con el París Saint-Germain, el gabonés Pierre-Emerick Aubameyang no le pierde el paso con 16 goles en 15 partidos con el Borussia Dortmund.
Cuando la tierra de tus raíces puede más: Aubameyang con Gabón y no con Francia
La estrella de la Copa Africana de Naciones 2017 pudo ser seleccionado francés, pero escuchó el llamado de la sangre.
¿Francia hubiera ganado la Eurocopa contra Portugal si el compañero de Griezmann hubiera sido Aubameyang y no Olivier Giroud? Jamás lo sabremos…
Jamás lo sabremos, porque en 2009, con solamente 19 años cumplidos, Pierre-Emerick aceptó la convocatoria de la selección africana de Gabón y quedó así enlazado a la tierra de su padre de por vida. Papá Aubameyang entonces trabajaba para el AC Milán y su hijo ya había jugado con Francia sub-21 y estaba por recibir también el llamado de Italia.
Sin embargo, prefirió a Gabón antes que a Francia. Se trata de una decisión audaz, pues varios hijos de padres africanos nacidos sobre suelo francés han preferido a “Les Bleus” antes que a las naciones de sus orígenes: Patrick Viera, hijo de senegaleses, optó por Francia y vio cómo Senegal ganó 1-0 en el mundial de Corea y Japón 2002.
Claramente Gabón es una selección aún desconocida en el mundo futbolístico. Jamás han calificado a Copas del Mundo, tampoco tienen Copas de África en su haber y en el último ranking de la FIFA aparecen en el puesto número 110 ¡Por debajo de Nueva Zelanda!
¿Por qué habría de jugar para una selección pequeña en vez de jugar para la gran Francia? Aubameyang confía en escribir historia en la tierra de sus ancestros: Gabón albergará la Copa Africana de Naciones 2017 y, con un poco de fortuna, pueden obtener su primer título internacional.
Aunque nadie lo recuerda ya, Aubameyang jugó con Gabón sub23 ante México sub23 en Londres 2012. Es el líder de una camada de futbolistas que anhelan lograr el boleto a Rusia 2018 en un grupo eliminatorio compartido con Costa de Marfil, Marruecos y Malí.
Jugando con Francia, hubiera podido ganar títulos, jugado con compañeros de élite mundial como él, ganado mucho dinero por patrocinios y llevado una carrera con puertas abiertas. Pero prefirió al país de Papá Aubameyang. Y es que algunas veces el llamado de tu sangre y el cariño por la tierra donde están tus raíces puede más.