Fue en el Estadio Olímpico Atatürk de Estambul, con el vigente campeón de Europa, Liverpool, en una Final de la Champions League.
Ocurrió en Estambul y el protagonista fue el Liverpool
El vigente campeón de Europa busca volver al lugar de su mayor gesta histórica.
Pero hace 14 años.
La capital de Turquía recibirá su segunda Final de la máxima competición de clubes del ‘Viejo Continente’ y lo hará tres lustros después de ser el escenario de la que, quizás, ha sido la más memorable de la historia.
Aquella vez, el Liverpool perdía 3-0 al medio tiempo ante el Milan, que lucía como el gran favorito para llevarse el título. Paolo Maldini marcó antes de cumplirse el minuto de juego y Hernán Crespo, con un doblete, parecía rematar a los Reds al 39’ y al 44’.
Pero algo pasó durante el medio tiempo y Steven Gerrard, capitán del Liverpool aquella noche, describió lo que escucharon en el vestidor.
“Escuchamos mucho ruido de nuestros seguidores y supimos que no se había terminado y que nos apoyaban”, expresó en una entrevista a la UEFA.
Los miles de fanáticos que viajaron desde el puerto inglés, con la goleada en contra, entonaron su himno, el ‘You’ll Never Walk Alone’, y se escuchó hasta los vestuarios.
Los jugadores respondieron. Gerrard marcó primero de cabeza al 54’; no habían pasado siquiera dos minutos cuando Vladimir Smicer le dobló las manos a Dida en un disparo desde fuera del área y al 60’, Xabi Alonso falló un penal, pero marcó en el contrarremate el gol del empate.
El ‘Milagro de Estambul’ comenzaba a gestarse.
Las acciones se emparejaron y el Milan se reacomodó. Hubo tensión durante la media hora final del tiempo regular y la media hora de los tiempos extra. El momento clave ocurrió en un cabezazo de Andriy Schevchenko que tapó Jerzy Dudek, quien también paró el contrarremate a quemarropa.
El momento psicológico de los penales estaban totalmente del lado del Liverpool. Dudek le paró penales a Serginho y Andrea Pirlo en los primeros dos turnos de los rossoneri. Dietmar Hamann y Djibril Cissé marcaron por los ingleses.
Jon Dahl Tomasson acercó al Milan, pero el tercero del Liverpool, por parte de John Arne Riise, fue atajado por Dida; Kaká puso el empate parcial y Smicer le dio ventaja a los Reds de cara a la última ronda.
No fue necesario que Gerrard cobrara el último: Jerzy Dudek se elevó a héroe al taparle a Schevchenko para asegurar el quinto título del Liverpool y la remontada más improbable en la historia del futbol europeo.
El 30 de mayo habrán pasado exactamente 15 años y cinco días de la proeza. Hoy, Liverpool inicia el camino para volver a Estambul, pero desde la posición de campeón y favorito.