El resurgir de Chivas: lo mexicano está de moda otra vez

Cuando Matías Almeyda afirmó en la conferencia posterior al 3-0 del Clásico que su mayor confianza en los mexicanos resultaba harto paradójica, muchos se le fueron encima. Directo a la yugular. "Lo dijo por quedar bien", opinaba alguno; "claro, si Almeyda dirigiera en España hablaría maravillas de los españoles", mencionó otro; "es mera corrección política", añadió alguien más.

Marcelo Bielsa, quien dirigió al hoy estratega del rebaño en la selección de Argentina entre 1999 y 2002, alguna vez explicó lo que se busca con foguear al talento joven:

"Es fácil poner jugadores jóvenes y acrecentar la lista de debutantes. Lo que hay que hacer es poner jugadores jóvenes y que no fracasen; porque, poner jugadores jóvenes para demostrar que no sirven, ésa no es la función. La función es poner jugadores jóvenes para demostrar que sí sirven."

Pasadas varias jornadas de la Liga MX, nadie hubiera creído que refuerzos costosos como Carlos 'Gullit' Peña, Néstor 'Avión' Calderón o José Juan 'Gallito' Vázquez habrían de pasar más minutos sentados en la banca que de pie sobre el terreno de juego. Lo que es más: nadie hubiera apostado a que tal sacudida tendría a las Chivas peleando los primeros puestos gracias a una racha de varios fines de semana sin derrota.

¿Si no han jugado los consolidados, entonces quién?

Aquéllos quienes han retribuido la confianza de su técnico son ni más ni menos que Javier 'La Chofis' López, Michael 'El Tortas' Pérez y Ángel 'El Chelo' Zaldívar (asimismo, varios añaden a Raúl 'El Dedos' López durante los primeros meses de la era del argentino). Se trata de sangre nueva bombeando desde abajo que fluye, abastece y renueva a todo el aparato circulatorio del Club Guadalajara. Lejos de fracasar, han sido puestos y han demostrado que sí sirven, diría Bielsa.

Viejo lobo de mar que disputó cada balón con el cuchillo entre los dientes, patrón del medio campo en sus andares por Argentina, España e Italia y después de vuelta a casa, Almeyda entiende que la juventud no es cuestión de edad, ni el talento cuestión de bandera. Sin embargo, él apuesta muy fuerte en un torneo donde su escuadra es la única que no tiene que acudir, como el resto de los equipos, al Instituto Nacional de Migración para tramitar los permisos de trabajo en México de más del 80% del plantel.

Así pues la magnífica racha del Rebaño no pudo ser más oportuna. En épocas en las cuales pareciera que ser mexicano es causa de discursos ofensivos y estereotipados, épocas de clubes mexicanos alineando selecciones del resto del mundo, el resurgir del Guadalajara es un buen motivo para pensar que lo mexicano está de moda otra vez. Es sólo fútbol, es verdad. Como también es verdad que más allá de los resultados de los rojiblancos ser mexicano no debe pasar de moda jamás.