Liverpool no tuvo su actuación más destacada pero como viene siendo habitual esta campaña, sacó los tres puntos en casa ante el Genk. Al conjunto Red le bastaron un gol de rebote y una buena jugada de Mohamed Salah para vencer 2-1 a los belgas.
Liverpool vence al Genk sin pisar el acelerador
Klopp rotó piezas clave y con goles de Oxlade y Wijnaldum, el Liverpool lidera el grupo.
Al Liverpool le costó trabajo abrir la defensa del Genk que había alternado partidos a un bajo nivel con 10 goles recibidos en dos partidos –vs Liverpool y Salzburg- con una gran actuación ante el Napoli en el empate 0-0.
Al 13’ fue Georginio Wijnaldum quien abrió el marcador tras una gran jugada de James Milner en la banda izquierda y aprovechando un rebote en el cuerpo de Dewaest, que hoy completó la defensa de cinco hombres de Felice Mazzú.
Los pupilos de Jürgen Klopp dominaron en balón y las acciones, mientras que el Genk cerró en su primer tercio y rara vez inquietó al conjunto de Anfield. Sólo contragolpes y acciones a balón parado generaron peligro para los belgas que, precisamente de un saque de esquina, igualaron el partido.
El gol fue obra de Mwana Samatta al 39’. El nacido en Tanzania cabeceó un centro lanzado por Bryan Heynen con mucha potencia en el primer poste y nada pudo hacer Alisson Becker, que simplemente observó en primera fila el potente cabezazo del africano.
El Liverpool se fue perdiendo al descanso pero muy pronto volverían a ponerse por encima en el marcador. El segundo de los Reds llegó al 52’ cuando una buena jugada de Mohamed Salah permitió recibir con espacio en los linderos del área a Oxlade-Chamberlain, que continuó con su racha goleadora con un gran golpeo que superó a Gaetan Coucke.
El cuadro local siguió dominando aunque le costó trabajo profundizar. Klopp rotó varios jugadores importantes mientras que el equipo no pisó a fondo el acelerador y se conformó con el 2-1 que los pone muy cerca de los Octavos de Final, como líder del Grupo con nueve unidades por 8 del Napoli.