Simples trámites. Así fue cómo resolvieron el París Saint Germain y el Bayern Munich sus partidos de Champions en el Grupo B. Los parisinos, casi bostezando, derrotaron por 3-0 al Anderlecht y los alemanes hicieron lo propio con el Celtic. A los Rojos les costó un poco más de sudor, más por su irregular racha actual que por méritos ajenos.
Para ellos, simples trámites: el PSG y el Bayern golearon al Anderlecht y al Celtic
El equipo francés le ganó por 4-0 al Anderlecht, y en Bélgica. Mientras que los alemanes derrotaron por 3-0 al Celtic. Ambos sumaron de a tres casi sin transpirar y están a un paso de clasificar en el Grupo B.
Con equipos de esta envergadura todo parece sencillo, el fútbol se reduce en complicaciones innecesarias. La acumulación de buenos pies y calidad garantiza, en la generalidad de los casos, resultados favorables. Parece demasiado para cualquier equipo soportar la abrumadora suma de Neymar, Cavani y Mbappé en el caso de los franceses. O de Robben, Müller y Lewandowski en el de los alemanes. Y eso que solo nombramos a algunos…
En este escenario, el de un grupo nítidamente desequilibrado, lo único que termina importando son los duelos directos entre los más fuertes. Y en ese primer enfrentamiento, el PSG se aprovechó de la crisis del Bayern y le propinó una dolorosa goleada por 3-0 en París, golpazo que terminó con el ciclo de Carlo Ancelotti como entrenador del Gigante de Baviera.
El que madrugó en serio fue la nueva amenaza europea, el PSG. Al minuto 3 apareció una de sus multimillonarias adquisiciones, Kylian Mbappé. Escapó por derecha y remató fuerte, dejando sin chances al arquero y sin aliento al defensor que trató de alcanzarlo.
A los 44, Edinson Cavani puso la cabeza y el 2-0 luego de una asistencia, también con la testa, del mismo Mbappé. Los belgas nada podían hacer y casi todas las acciones de riesgo, en esos 41 minutos que pasaron entre el primer y el segundo gol, fueron del PSG.
¿Y qué pasó en Alemania en la parte inicial? Casi lo mismo. El Bayern tardó un poco más en abrir el marcador: 17 minutos. Fue cuando Thomas Müller perforó el arco entrando por la derecha del área. La diferencia estuvo en que demoró menos en lograr el segundo. A los 29 minutos, centro desde la izquierda que Joshua Kimmich transformó en un golazo al cabecear desde lejos, bombeado sobre el portero.
En la segunda parte, más de lo mismo, el PSG y el Bayern ampliaron diferencias sobre sus pobres rivales. Esta vez, el primero en festejar fue el conjunto alemán cuando, a los 51, Hummels marcó de cabeza el 3-0 tras un tiro de esquina.
La respuesta, lógicamente, no llegó de su rival, el Celtic, sino del PSG. En Bélgica apareció Neymar para convertir el 3-0 de los parisinos ante el Anderlecht. Fue un tiro libre rasante a los 66, engañando a los jugadores que saltaron en la barrera. Y a los 88, Ángel Di María puso el 4-0 final.
Así las cosas, el Grupo B quedó como estaba: el PSG continúa de líder, tres puntos por encima del Bayern. Y solo queda esperar la revancha entre los dos monstruos. El resto, un simple trámite.