Un brillante Murray no pudo con la experiencia de los Lakers

A pesar del tremendo partido de Jamal Murray, los Denver Nuggets no pudieron vencer en el Juego 4 de la Final de la Conferencia Oeste a los Lakers, quienes apelaron a su experiencia en los últimos minutos para tomar ventaja de 3-1.

La precisión y concentración caracterizó el primer cuarto en Orlando. Por parte de los Lakers, Anthony Davis lució muy sólido en sus disparos y terminaría con 14 puntos. Mientras que Dwight Howard no dejó escapar un solo rebote y gracias a su físico y experiencia ganó 8 rebotes para una ventaja de 9 puntos.

Pero los Nuggets respondieron bien gracias al empuje de Gary Harris y la estrella Jamal Murray, quien encestó 12 unidades para ser uno de los más productivos de Denver.

Para el segundo cuarto, Anthony Davis se fue a la banca y dio paso a Kyle Kuzma, quien también con gran precisión suplió los minutos de descanso de 'The Brow'.

Los Lakers tenían el partido controlado hasta los últimos cinco minutos cuando se les negó la precisión con la que arrancaron y Jamal Murray encabezó el ataque rival con todo y jugadas de fantasía, como aquel cambio de mano que restregó en la cara de LeBron James.

Murray se iba al vestidor con 16 puntos y 4 asistencia; sin duda el mejor elemento de Denver.

El conjunto de LA recobró de a poco la puntería en el arranque del segundo tiempo. Davis afinó, pero fue la calidad de Rajon Rondo lo que mantuvo a los Lakers en la pelea cuando los Nuggets concretaron mejor sus ataques al tablero.

Rondo, quien suma más de mil asistencias y se encuentra en el top 10 de todos los tiempos, mostró paciencia y recuperó balones que se tradujeron en puntos.

Jamal Murrey y Nikola Jokic fueron una pesadilla para la denfensa de LA. El serbio se discutió en los rebotes, asistencias, pero en los ocho minutos restantes del último cuarto se fue a la congeladora con 16 puntos, 4 asistencias y 7 rebotes tras acumular faltas, cortando una excelente racha en el mejor momento de Denver.

Los cincos minutos de cierre fueron intensos. Denver recortó la distancia a tres puntos en gran parte por la destreza de Murrey y, para su fortuna, Jokic regresó cuando los Lakers, presionados por el reloj, cometieron faltas innecesarias y pérdidas de balón infantiles.

Sin embargo, LeBron y compañía sacaron toda la experiencia en este tipo de partidos, la cual hizo falta en los Nuggets que desperdiciaron oportunidades de oro al frente. Las faltas sobre James hicieron la diferencia con segundos en el reloj.

Los Lakers se llevaron un Juego 4 muy apretado, y por ahora descansarán el viernes para continuar la serie el sábado y dispuatar el Juego 5 con pronóstico reservado.