Con una gran a ctuación de Orbelín Pineda, AEK dio un paso firme rumbo al bicampeonato de la Super Liga griega luego de imponerse 3-0 al Panathinaikos de manera s ólida y contundente.
Orbelín Pineda da un gran partido en la goleada del AEK a Panathinaikos
El mediocampista mexicano puso una asistencia y estuvo a nada de hacer un golazo para el triunfo que acerca a su equipo al bicampeonato.
Y es que el mediocampista mexicano dio una asistencia, estuvo a punto de hacer un golazo para retener y conservar en la pupila, y se mostró toda la noche en el campo del Agia Sophia Stadium.
El equipo dirigido por Matías Almeyda alcanzó 75 puntos y puso distancia a los 71 de su rival de esta noche que le sigue en la segunda posición a tres juegos de que finalice la ronda de campeonato.
Los goles del conjunto ganador fueron obra de Niclas Eliasson a los 7 y 69 minutos. Y de Ezequiel Ponce a los 38.
Fue justamente en la jugada del primera tanto, que Orbelín robó un balón en el medio campo proyectó entonces a Eliasson, con un estupendo pase, que entró al área, se quitó a tres rivales y anotó.
El mexicano hizo un futbol a la altura de las circunstancias. Se mostró muy participativo. Robó balones, distribuyó el esférico a lo largo del campo, y recibió faltas.
En la primera mitad, AEK pudo llevarse un marcador más holgado pero Ponce, que hizo un gol, no estuvo muy acertado frente al arco.
El tanto de Ponce, justamente, se dio tras un mal pase retrasado de Akaydin y que arrastró el argentino hasta el área para vencer a Dragowski.
Orbelín, pese a su buena primera mitad, dejó lo mejor para la segunda parte.
Siguió en el mismo tono, cual abeja que pica y huye, en el área rival.
Tres jugadas de muestra. A los 60', se quitó tres del Panathinaikos. Entró al área, disparó y el esfericó pegó en el travesaño. En el contrarremate, Ponce se tiró de tijera y le pegó también al poste tras el desvió de Dragowski.
Más tarde a los 68, cabalgó de nuevo por la izquierda, sus dominios esta noche como si de un caballo salvaje de tratara, y metió un servicio que Bakasetas estrelló en el arquero, en el rechace Eliasson marcó su segundo tanto.
Finalmente, a los 80, de nueva cuenta Orbelín se coló por la banda izquierda y quedó solo ante el arco del Panathinaikos. Su disparo se fue muy cruzado. Un par de minutos más tarde salió de cambio.